Yo también tengo la Regla.

        Esta entrada en el blog me recuerda a esos días que entrenaba con mi gran amigo, Saúl Santana, en la pileta del C.N. Metropole. La añoranza no se debe a esos increibles entrenos a cara de perro que nos pegábamos como si de una competición fuera, sino a una frase que mi compañero se inventó y, el paso del tiempo le ha dado la razón.

         Muchas veces se cae en el tópico que tus compañeros de equipo son tu segunda familia. Es cierto, en éste caso puedo afirmar que Saúl y yo, podríamos ser como hermanos porque habré pasado más horas de mi vida con él, que con muchos de mis familiares de sangre. Horas, días, semanas, meses, años donde hemos vivido momentos de: alegría, éxito, euforia, fracaso, melancolía...... etc, etc, que nos ayudó a conocernos tanto que ya sabíamos como era el otro.

           El grado de amistad y afinidad que teníamos los dos era tan potente que Saúl se creó la frase, FURRO TIENE LA REGLA para esos días que estaba rayao, raro, extraño... etc, etc. Cuando se lo decía a los demás referiéndose a mí, sólo me reía y no le aprestaba atención porque lo consideraba una bobería como cualquier otra, pero el paso del tiempo le ha dado toda la razón.

            No hace falta ir muy lejos en el tiempo para aplicar la expresión "furro tiene la regla". Ayer mismo después de Correos y con dirección a la piscina, salí con la idea de pillarme un año de excedencia para desconectar de todo. Una vez en el agua entrenando seguía con el mismo " run run " en la cabeza. Gracias a mi constancia y coraje pude terminar el entreno, pero la "matraquilla" seguía todavía rebotando por ahí. Era tan persistente, que cuando hablé con Dj  se lo comenté superconvencido del plan.

                Ya hoy con mas calma y tranquilidad puedo afirmar que la locución de mi compañero sigue muy latente todavía.