miércoles, 27 de agosto de 2014

Cuenta atrás

    Hoy, 27 de agosto, queda justamente treinta días para conseguir el objetivo de IRONMAN. El reloj ahora empieza a sonar "tik-tok" con más fuerza. Atrás ya quedan los casi cuatro meses desde que tomé la decisión de aventurarme en el objetivo más ambicioso deportivamente hablando. Esos meses ya son parte de mi vida. El día que aposté por esto no sabía a ciencia cierta donde me metía y todos los sacrificios que se necesitaba para llegar en la mejor forma posible.

      Recuerdo claramente como fue ese día de inscribirme en el IM. Era lunes y Campillo vino a casa para ayudarme a hacer el pago para la competición. También recuerdo que al terminar el proceso le comenté que mi objetivo era terminar la prueba con una hora de natación, seis y media de bicicleta y cuatro de carrera a pie. En total hace un cómputo de once horas y treinta minutos. Ya tenía objetivo personal marcado por el que luchar día tras día, pero Campillo rápidamente desestimó mi sueño y me dijo que me marcara la palabra FINISHER. Nunca mas volvimos hablar de mi objetivo pero, yo dolido en mi orgullo por pensar que no valía ese tiempo, me marqué trabajar duramente por conseguirlo.

       No se pueden imaginar lo duro que se hace este camino psicológicamente con entrenos a 35 grados, madrugones los findes de semana para salir a rodar, dolores en las piernas, falta de días libres para disfrutar del verano. Creo que esta parte ha sido la peor que he llevado porque nunca había machado tanto y menos en los meses estivales. Ha sido tan agudo este esfuerzo emocional que me ha dejado vacío y sin ganas de seguir hacia adelante, mas de dos veces, por todo el desgaste psicológico al que te sometes.

     Pero he de decir que si no he tirado la toalla y sigo con ganas e ilusión es gracias a dos personas: Catalina y Campillo. La primera es mi pareja sentimental, la segunda es mi pareja deportiva, pero ambos han sufrido, seguramente, mis bajones y les estoy agradecidos eternamente por el momento que me han dedicado.

      Sin Catalina y sin su comprensión, ayuda y esfuerzo, mi camino hasta hoy no hubiera sido tan fácil como está siendo. Muchas gracias por dejarme disfrutar de este sueño loco que se llama Ironman y, por todas esas tardes de verano que no hemos podido compartir por culpa de mis entrenamientos. Sin duda alguna eres la parte de mi que nadie conoce y que me hace estar al cien por cien cada día. GRACIAS.

     Además, en todo este tiempo Juan Carlos Campillo Vicente (Campillo) ha sido clave y lo seguirá siendo por la función de amo de llaves y/o padrino  que ha realizado conmigo en todo este tiempo que hemos compartido entrenando juntos. Me ha guiado por ejemplo en viajes y, también en competiciones donde me iba a estrenar. No hay duda alguna que sin su presencia este trayecto no hubiera sido el mismo. No me refiero a los resultados, ni al estado de forma sino al camino que he descubierto gracias a tí, Campillo.




domingo, 24 de agosto de 2014

El Semanal

    Ha sido una semana un poco extraña y convulsa por las dolencias del Aquiles que me apareció hace siete días, en Palma. El dolor no ha desaparecido del todo por lo que me ha dejado un poco desconcertado al romper una racha tan buena de meses de continuidad. La molestia ha ido a menos pero no soy capaz de correr sin dolor, así que he decidido no salir a trotar para recuperar y realizar una pequeña sesión de elíptica y, así para quitarme el mono.

     La nota graciosa en el agua fue que el Lunes me olvidé el bañador y tuve que nadar con un bermuda playero. Si cuando la cosa no está para uno pues.... pasan estas anécdotas. Las sensaciones nadando han sido raras como la semana en general, pero lo bueno es que aún así he sabido luchar bien y sacar buenos ritmos. Ya me gustaría siempre sentirme con buena flotabilidad, deslizamiento y rápido pero si no es así hay que enfundarse el mono de minero.

     En la bici para rematar la machada de infortunios pues decir que ayer sábado pinché tres veces y, Alexis me tuve que venir a buscar a San Miguel porque ya la cubierta no daba mas de sí. Han sido tres salidas con claro dominio del terreno montañoso con muy buenas subidas como por ejemplo: a la Cala donde he conseguido mi record personal.

      Después de leer mi breve resumen de estos siete días creo que lo mejor es que mañana empieza otra semana y, así olvidarme de ésta que ha sido complicada y revirada desde un principio.

     Natación: 15.000 metros de natación repartidos en 4 sesiones de piscina (contento por saber luchar).
     Bicicleta: 274 kilómetros en tres salidas (tengo que llevar la bici al mecánico para una itv)
     Carrera a pie: 30 minutos de elíptica (que no cunda el pánico)

miércoles, 20 de agosto de 2014

Carrera a pie

    Si hemos terminado de nadar y de montar en bici, ya sólo nos queda afrontar, la última disciplina de las tres que conforma el triatlón, la carrera a pie. Para poder ser un Ironman tendremos que recorrer la distancia de una maratón (42 kilómetros). Para muchas personas esta longitud sería el objetivo de su vida, para un ironman es la última barrera que tiene que superar para ser un finisher.

     La carrera a pie a mi humilde y prematuro punto de vista como triatleta, es el sector que decide quien va a subirse a los cajones de las medallas. Es cierto que la natación selecciona un grupo, o que la bicicleta marca mucha distancia con los demás pero, a mi ver, la carrera a pie es la que tiene la última palabra porque es aquí en donde se sufre mas por la fatiga acumulada de horas de esfuerzo. También suele darse el caso que de tanta tralla que se han dado en la bicicleta, terminan por estallar corriendo y apareciendo el famoso amigo del mazo. Sin duda alguna para mí la carrera a pie es la disciplina que más castiga, duele y se sufre.

      Mi metodología de entrenamiento es muy básica porque consiste en hacer carrera continua dos veces por semana. Igual parece muy poco para enfrentarme a una maratón, pero con mi dilatado expediente lesivo por culpa de correr es a lo que mas puedo llegar hacer sin sufrir. He decidido hacer menos entrenamientos, menos salidas a trotar, pero primando la continuidad que es lo que mas necesito y la salud de mis piernas. Hasta hoy este sistema estaba dando sus frutos porque estaba encontrando esa continuidad tan ansiada, pero esta misma semana he tenido que parar por culpa de un dolor en la zona del Aquiles.

       La carrera como dije antes es la disciplina que mas castiga, duele y se sufre porque es muy fácil lesionarse. En mi caso es mi talón de Aquiles, vaya cachondeo si ahora me lastimo esta zona y no puedo entrenar durante unas semanas, por lo poco desarrollado que tengo esta zona al haber realizado natación que trabaja, con más ahínco, el tren superior.

lunes, 18 de agosto de 2014

El Semanal

    Con un día de atraso sale la publicación de El Semanal, así que no me lo tengan mucho en cuenta. Fue una semana bastante dura porque ha sido el máximo volumen y carga en las tres disciplinas. Por lo que pueden imaginar que el cansancio es real pero la alegría de soportado es mejor.

     Aprovechando que el viernes era festivo, Campillo y un servidor, nos hemos movido a la isla de al lado, Palma de Mallorca, para reconocer el circuito de la bici del Ironman y acumular kilómetros en las patas. La estancia consistió en tres días con un primera sesión de 180 kms, es decir, una vuelta entera al trazado. En el  segundo día hicimos la segunda parte de 80 kilómetros con la subida al Monasterio de LLuc. Y, para terminar con buen sabor de boca nos cascamos ayer, domingo, un rodaje fácil de una hora de bici más otra hora de transición de carrera a pie. 

     La expedición fue positiva porque se reconoció el terreno al que me voy a enfrentar en cuarenta días y, además he superado mi máxima tirada encima de la bicicleta, con gran holgura, que era de 130 kilómetros, Además he conseguido batirme al realizar estos 180 con una aceptable media y aguantando lluvia, frío y viento. Vaya liberación al llegar a la habitación después de seis horas de esfuerzo.

      En lo que se refiere a natación he podido disfrutar de dos días complicados con series de calidad y otros dos de relax y recuperación. El único punto negro se lo lleva la carrera a pie de ayer, domingo, que la terminé con un dolor feo en la zona del talón de Aquilés. Espero que sólo sea una molestia pasajera por el cansancio acumulado.

      Natación: 15.000 metros de natación repartidos en 4 sesiones de piscina (metros y calidad).
      Bicicleta: 390 kilómetros en cuatro salidas (tengo que cambiar de sillín YAAA).
      Carrera a pie: 120 minutos en dos días (esperar a la evolución de la zona del Aquiles).

miércoles, 13 de agosto de 2014

Ciclismo

    El ciclismo es la segunda disciplina que se practica en el triatlón después de la natación. Es el sector más largo de kilómetros, dependiendo de su modalidad hay de 20, 40, 90 y 180 kms, y de tiempo realizado por lo que hay que dejarle bastantes horas a la semana de preparación.

     En mi caso, el ciclismo, es el peor segmento que realizo de los tres. No es ninguna apreciación subjetiva sino una estadística objetiva cien por cien. En los pocos triatlones que he corrido, en este sector no aparezco, por ejemplo, ni en el top 15 de mejores marcas, mientras que en natación y en la carrera a pie si me dejo ver en esas posiciones punteras.

     La metodología de entrenamientos para esta disciplina no es otra que la de salir con los compañeros cuatro veces por semana. Yo no entiendo mucho o mejor dicho nada de ciclismo y menos de preparación, pero suelo hacer, de normal, dos salidas entre semana de unas dos horas y media cada una como máximo y, las otras dos mas largas para el fin de semana que hay mas tiempo. No puedo afirmar que siga un patrón determinado de entrenamientos como en natación porque realizo lo que los compañeros marcan, pero trabajo el terreno montañoso y el intentar ir a rueda. A parte de esto, existe algo mas?? jeje

      Es aquí, en la bicicleta, donde veo que voy más justo por lo poco que he practicado este deporte en mi vida y, por la duración de más de seis horas que puedo hacer para cumplimentar los cientos ochenta kilómetros. El ciclismo para mi no sólo es una dificultad física, obvio por el esfuerzo, sino también psicológica por los continuos adelantamientos que sufriré. Para este problema mental de no venirme abajo, me he puesto la meta de conseguir una media de kilómetros hora, y ceñirme a ese objetivo sin que me perturbe el rosario de triatletas que me darán caza.

domingo, 10 de agosto de 2014

El Semanal

    Rara, rara, rara ha sido la semana y sus sensaciones. Como si de una montaña rusa se tratara con subidones de endorfina, bajadas escalofriantes al subsuelo y algún terreno llano donde descansar.

     El lunes, por ejemplo, fue un día fantástico con una muy buena sesión de agua y, otra mejor de carrera a pie realizando mi  mejor tiempo en catorce kilómetros. Un día muy satisfactorio porque me exprimí bastante y el cuerpo supo respondonderme perfectamente. El martes al ser festivo, en San Antonio, lo pillé de descanso total para recuperar de días pasados que el cuerpo necesita también sesiones de relax.

     Y, a partir, del día de descanso es cuando empiezan las malas sensaciones nadando y en la bici, Y, no sólo eso sino que se me contagia a mí mismo y voy como aplatanado, más cansado de lo que acostumbro estar y con más sueño de lo normal. Sin duda que no me explico como un día me ha dejado tan descolocado.

      El resto de la semana se ha hecho cuesta arriba por tener que librar sesiones duras con tan malas sensaciones, cansancio acumulado y fatiga extrema. Lo mejor de todo ha sido que no me he rendido y los entrenamientos que me propuse los he terminado con la cabeza bien alta.

      Natación: 15.500 metros de natación repartidos en 4 sesiones de piscina (contento por como he superado los entrenamientos de esta semana).
      Bicicleta: 264 kilómetros en tres salidas (vaya dolor de piernas y sufrimiento agónico en la salida del sábado).
      Carrera a pie: 120 minutos en dos días (feliz por como mis piernas me han respondido)

sábado, 9 de agosto de 2014

Natación

    Con la publicación de hoy "Natación" pretendo tratar de explicar las tres disciplinas del triatlón desde mi punto de vista, con sus puntos negativos, forma de entrenos y demás.

     En todo triatlón se empieza con el sector acuático que puede variar de 750 metros que sería el sprint, hasta los 3.800 metros que sería una distancia Ironman. Al ser la primera disciplina que se realiza en el triatlón no es definitiva a la hora de engalanar a un vencedor, pero si puede ser un corte claro para los que no van a luchar por la victoria. El gran problema de la natación, a mis ojos, es la salida de la competición por evitar posibles codazos, patadas o tirones en los pies por parte de los demás participantes. Es aquí donde radica el principal escollo de la modalidad acuática. El nadar en mar, en río, con olas o medusas es para todos por igual de ventajoso o perjudicial.

    Al haber practicado y, además, competido en natación desde bien pequeño, éste sector lo considero mi punto fuerte del triatlón. Todos mis compañeros me aconsejan que no me guarde nada y que si puedo aventajar 3 minutos, mejor que dos, o si son cuatro mejor que tres. Es aquí donde tengo que aprovechar mis virtudes. No en vano le dedico cuatro sesiones semanales de entrenamientos para no confiarme y descuidar mi estado óptimo para enfrentarme a los 3.800 metros del Ironman.

     Para ello nado entre quince ó dieciséis mil a la semana planteados en cuatro días con objetivos bien claros y distintos. Un día lo dedico a series largas para trabajar el aeróbico que el Ironman no es otra cosa que una prueba de fondo y resistencia. Otra sesión, por ejemplo, va enfocada a lo contrario de la anterior que es lo anaeróbico con repeticiones de series con poco descanso para trabajar con fatiga. El siguiente día suelo hacer un trabajo más específico de piernas con aletas, palas y algo de estilos para variar del crol. En la última sesión no busco más allá que nadar sin más, pero sé que al final me caliento y termino estrujándome como un primo.

       El orden de las sesiones semanales no es el mismo que el explicado anteriormente, así evito caer en la rutina.

domingo, 3 de agosto de 2014

El Semanal

    Nunca hubiera imaginado que me iba a alegrar tanto por un domingo como el de hoy. Pero después de los siete días de entrenamientos, hoy ha sido la recogida de los frutos como muy bien decía Campillo esta mañana en la sesión de bicicleta.

     No sólo ha llegado Agosto, calor y más sofoco en esta semana sino que también unos pedazos de entrenos guapos guapos. En la piscina, por fin, he tenido una semanita sin estrujarme a intensidades fuertes y sin series cronometradas aunque se ha suplido con un considerable aumento de metros aeróbicos y, un buen test de 30 minutos que lo he superado como bien me marqué.

     En el mundo de las dos ruedas (bicicleta) las sesiones de esta semana iban más encaminadas al terreno montañoso. Recuerdo todavía la salida del martes con sus seis Ses Marrades de kilómetros y medio o, las tres calas del sábado con viento y humedad desagradable. Una vez realizado este trabajo no queda otra que sentirse orgulloso por haberlo dado todo y llegar a casa con el depósito en reserva.

     La mejor noticia, sin duda, es en la carrera a pie donde ya voy haciendo tiradas de cerca de una hora a ritmos de cuatro minuto aproximadamente. Es el sector que menos dedicación le he ofrecido hasta ahora por el miedo de volverme a lastimar.

     Natación: 17.600 metros de natación repartidos en 5 sesiones de piscina (contento por haber sabido sufrir en el test de 30 minutos con tanta fatiga acumulada de la bicicleta).
     Bicicleta: 341 kilómetros en 4 salidas (vaya semana de subidas, buff).
     Carrera: 110 minutos en dos días (feliz y muy cansado de piernas).

sábado, 2 de agosto de 2014

Agarrarse que viene el coco

    Agosto es.... calor, humedad, playa, fiestas, cervezas, space, conciertos, pero también es el mes por antonomasia y preferido, al menos, en el territorio español para reservar las vacaciones e irse a descansar y olvidarse del trabajo. Pero este año en mi calendario, Agosto, va a ser la piedra angular de la preparación al IM. Será el mes de carga de metros en la piscina, de kilómetros sentado en el sillín de mi bicicleta y, esperemos, de horas corriendo por los caminos de alrededor de mi casa.
     Se puede apreciar que no es muy halagüeño los próximos 30 días que se acercan de la planificación. Es sin duda el mes de acumular fatiga muscular y de saber luchar con el cansancio mental. Es una barrera que tiene fecha de inicio (01/08) y de caducidad (30/08) y, que hay que superar para llegar con las mejores armas y confianza si se quiere competir con seguridad.

     La idea no es otra que hacer las mismas sesiones que tan buen resultado me están dando pero con un aumento de esfuerzo, tiempo, carga o metros. Por ejemplo, seguiré nadando cuatro días por semana pero subiendo los metros de cada sesión. En la carrera a pie ya estoy exprimiéndome casi una hora por día que salgo, y en la bicicleta ya estamos haciendo salidas de más de cuatro horas que son más de ciento veinte kilómetros. Ah, no me quiero olvidar de las famosas transiciones de bicicleta más carrera los domingos a medio día con la fresca, jejeje.
     
       Sólo llevamos dos días de este caluroso y fogoso mes y ya noto que es especial porque llevo dos machaques encima que no es muy sano. Ayer, cuatro mil de nadar y una carrera de catorce kilómetros que me dejó en el límite de la extenuación y, hoy cuatro horas de bicicleta con sus tres calas de terreno montañoso más una buena sesión de natación de treinta minutos que lo recordaré para siempre por el tirón que he sufrido, en el cuadriceps, al salir de la piscina. Bochornoso!!!.

       Igual este año me cambia la idea y el concepto de AGOSTO.

        

    

domingo, 27 de julio de 2014

El Semanal

    Volvemos a la rutina de entrenamientos después de la semana transitoria al medio ironman de Riaño. El cansancio del Half  se ha esfumado por completo y, ya estoy, otra vez, con la pilas nuevas cargadas para seguir guerreando. 
    Esta semana ha sido un sin parar de batallas encima de la bicicleta. Han sido más de 350 kilómetros con terreno montañoso, series a pulso alto y, de un dolor en el culete por el sillín que molesta una pizquito, jeje. Me siento muy orgulloso de haber podido responder tan bien en las cuatro sesiones.
     En la natación, una vez más y ya por enésima, me he vuelto a exprimir y a vaciar en la piscina. Es duro ir a entrenar sin compañia y, a veces se me hace monótono pero van saliendo buenos tiempos.
     La noticia mala de la semana ha sido que sólo he podido salir a correr 45 minutos por problemas en la espalda. No es mucho lo que he corrido pero... así vienen las cosas.

    Natación: 14.200 metros de natación repartidos en 4 sesiones de piscina (todavía recuerdo las series de 100 progresivas).
     Bicicleta: 354 kilómetros en 4 salidas (tengo que comprarme otras piernas).
     Carrera: 45 minutos en un solo día (al menos seguimos sumando que es lo que cuenta)
     

miércoles, 23 de julio de 2014

Ecuador

    Pasado el ecuador de la planning no es el momento adecuado para hacer valoraciones porque todavía resta más de 9 semanas para el día D, y es al final del camino cuando hay que sacar las conclusiones finales que son a la postre las reales. De momento este primer tramo me ha servido para concretar mi rutina semanal de entrenos de las tres especialidades con natación cuatro sesiones, bicicleta otras tantas y carrera a pie sólo dos. El sistema no es nada científico, ni moderno pero me está dando los frutos que yo quería, continuidad.

    Lo más difícil que yo veía antes de empezar este reto, sin contar los 180 kilómetros, era encauzar los meses de preparación sin ningún tipo de inconveniente físico que me frenara y me mandara a la enfermería un tiempo largo. Así que, una vez, encontrado un método que me haya servido para terminar dos triatlones exigentes como el de Palma y Riaño, no debería de cambiar nada porque mi éxito está en la continuidad que nunca tuve antes.

    Es cierto que la siguiente prueba es el IRONMAN y para ello, igual, habría que entrenar más, pero también corro el peligro de sobre entrenar o sobrecargar mis piernas mas de lo debido y romper el cuento tan fabuloso de la continuidad. Esta tesitura la voy a resolver con el mismo número de sesiones, por disciplina, pero incrementado un poco más de trabajo en ellas en Agosto, que sería el mes de acumulación, para después pasar a las últimas cuatro semanas de compensación o tapering.

    En el deporte no existe el sistema matemático perfecto que te resuelve una ecuación, que en este caso sería una preparación, y menos si el profesor que te lo quiere explicar soy yo. Así que, para la gran ecuación, me amparo en el razonamiento básico y fundamental que dice: no toques nada si funciona

   

   









domingo, 20 de julio de 2014

El Semanal

    Después de conseguir finalizar mi primer medio ironman, he necesitado un par de días de desintoxicación deportiva para volver a los entrenos recuperado física y mentalmente. Solo han sido dos días de relax que los he aprovechado para hacer más vida social y ociosa ( por ejemplo playa o trasnochar un poquito) con la finalidad de recargar pilas nuevas que tuvieran la misma ilusión que las de ahora.

     Además, después de alcanzar un objetivo marcado lo mas normal es parar de entrenar para darle vidilla al cuerpo y, que se regenere por sí solo sin darle más caña de la cuenta. Por lo que, finalmente, ha sido una semana transitoria de poco volumen para no perder lo ganado hasta ahora.

    Natación: 8.500 metros de natación repartidos en 3 sesiones de piscina (pocos pero muy buenos metros)
    Bicicleta: 260 kilómetros en tres salidas (todavía no me creo que haya tenido tan buenas piernas esta semana)
    Carrera: 45 minutos en un solo día (que malas sensaciones corriendo, buff)

miércoles, 16 de julio de 2014

Mi Primer Medio Ironman

    Todo objetivo tiene unos días que nos sirve para evaluar si el camino que estamos llevando es el correcto o, si hay que hacer alguna modificación para paliar las carencias y defectos encontradas si se quiere llegar con éxito a la meta marcada. Para mí este día marcado en el calendario fue el sábado 12 de Julio en Riaño, provincia de León, donde iba a estrenarme en la distancia medio ironman.

    En mi primera aventura en un Half me acompañaba, mi amigo, Campillo al que le debo un millón de gracias por la función que representó de Cicerone y de maestro en las horas previas a la prueba. Recuerdo de muy buen agrado la pequeña charlita (monólogo porque yo sólo afirmaba con la cabeza) que mantuvimos mientras calentábamos en bici y, que me sirvió para quitarme esa pequeña presión auto impuesta y ver el triatlón como lo que el me dijo: "no tener miedo a la distancia porque es una buena oportunidad para saber lo que me espera en el Ironman" Me recalcó varias veces que nadará rápido que es mi especialidad para sacar ventaja, que en la bicicleta no me olvidara de comer y beber porque sino.. y en la carrera a pie que fuera valiente y no me reservara nada. Igual no parecen unas palabras muy tranquilizadoras porque sólo se habla de sacrificio y esfuerzo, pero viniendo de Campillo no puede ser un mal consejo. Ahhh, me olvidaba de resaltar la frase más cómica: "Disfruta", todo un cachondo, este tipo, pero quedó bien, jejejeje.

     Con los consejos del míster en la mente y con cara de tensión, por ser consciente a lo que me enfrento, arranco mi primer medio sabiendo que tengo que aprovechar mi gran sector para desmarcarme de los demás. Es así que a la primera boya de 150 metros llego primero y ya con ganas de alcanzar la siguiente. Siento que voy rápido, nadando con buen estilo y frecuencia. Al empezar la segunda vuelta del circuito acuático bajo el ritmo porque no quiero quemar todos los cartuchos y me centro en un nado más amplio y económico. A los 20 minutos salgo del agua para hacer la primera transición que no es nada buena porque duro bastante en quitarme el neopreno y, encima en el momento de despojarme de el sufro un tirón en el gemelo. Por dios!!!!! Gracias a que sólo fue un sustito momentáneo y que se esfumó nada más subirme a la bicicleta

    El sector de bici constaba de 86 kilómetros en un recorrido de falsos llanos que teníamos que recorrerlo tres veces. Recuerdo que los primeros kilómetros fueron duros porque tenía frío y las piernas entumecidas por lo que prefiero ir al principio con poco desarrollo para entrar en calor. Hasta el primer punto de giro que era en bajada y con falsos llanos no consigo acoplarme del todo y voy regulando mucho el cambio para buscar un ritmo adecuado, y es cuando la carretera se pone más complicada, cuesta arriba, cuando consigo encontrar esa pedaleada feliz. Felicidad efímera que me la borra Barroso en menos de 16 kilómetros dándome alcance. Este momento de ser rebasado, no es fácil, pero ya lo tengo más que aprendido y superado porque sé cual es mi nivel y también sé que queda mucha carrera para desanimarme. Van pasando los kilómetros y en el 40, Campillo, puto Campillo, no se le ocurre otra cosa que animarme a chillidos al pasar a mi lado, cuando me adelantaba, que me desconcentra tanto que estoy a punto de chocar con el lateral. Al parecer quería decirme: COME Y BEBE, vaya susto me pegué. Sin mucho sufrimiento y buena cara alcanzo la mitad del sector y, es aquí donde mejores recuerdos tengo por una pequeña lucha librada con un chico que iba con una rueda lenticular. La lucha la perdí y se me escapó, el pibe, pero fueron unos 25 minutos de mutuos adelantamientos que me alzó la adrenalina y me mantuvo en carrera con los cinco sentidos. La última vuelta se me hace bastante amena y, me pongo por objetivo que nadie más me adelante. Un poco iluso porque al final dieron conmigo tres más.

    Después de 2 horas 29 minutos, con una media de 35 kms /h, para mi nivel es un gran parcial que me refuerza positivamente para luchar en la carrera pie, enfilo la última transición que es peor, incluso, que la primera porque se me queda una cala en la bici y la otra no, por lo que tuve que correr hasta boxes con una zapatilla, vaya liada. Lo que mal empieza, mal termina porque no sólo me lío al entrar en boxes sino que no encuentro mi hueco para dejar la bici y, además, el gps del reloj no encuentra señal, pero todos estos inconvenientes se disipan nada mas adelantar al primer chico saliendo de la transición. No sé como explicarlo pero me vine arriba al adelantarlo y aproveché este momento para buscar al que tenía delante que lo veía bien cerca, y en menos de dos kilómetros paso a dos más. Ahora los adelantamientos los hacía yo y me pareció un pasote. Esta sensación me mantuvo unos diez kilómetros con buenas piernas, concentrado y muy positivo. El reloj no encontraba seña gpsl, igual era la zona del pueblo, pero tampoco lo quería que lo buscara porque iba con buen ritmo y buenas sensaciones. Sensaciones que se multiplicaron cuando Campillo me chilla, que mania con chillar, diciendo: VAS TERCERO. No negaré que no me alegré por estar tan arriba y sentir un estímulo de orgullo por irme tan bien, pero también sentí presión por no dejar escapar la oportunidad de terminar en podium. A raíz, de esta noticia se abre una nueva carrera para mí con el objetivo de llegar sí o sí en la misma posición. Las fuerzas que me quedan son muy justas y las piernas las tengo muy fatigadas pero la ilusión por terminar esta competición son inmensas. Es ahora cuando comprendo las palabras de Campillo de engañar a la cabeza. Y es así, como pude terminar mi primer triatlón distancia medio ironman, engañando a la cabeza a que no pensara en negativo y en dolor.

    La posición final nunca me la hubiera imaginado, pero aprendí dos buenas cosas de ete día; 1) no estoy  tan blando en bici como yo me creo , y 2) la carrera a pie es la que decide las pruebas y hasta que no se pasa la meta todo puede cambiar radicalmente.
   

lunes, 14 de julio de 2014

El Semanal

    Hoy escribo el resumen de la semana, como la excepción que confirma la regla, porque ayer domingo no había muchas ganas después de la paliza de coche, avión y viaje.
     La semana giró alrededor a mi primer triatlón distancia medio ironman, que se celebraba el sábado, por lo que partí la semana en dos bloques bien diferenciados: a) Lunes y Martes doblando deportes con series aeróbicas y b) Miércoles, Jueves y Viernes días con alguna serie de calidad pero practicando sólo una especialidad para llegar lo más fresco y descansado a la prueba.

    En la piscina me planifiqué las sesiones de más a menos metros, del lunes 3.500 mts al viernes 2.000 mts. La bicicleta sólo la pillé martes y jueves,y además sesiones no muy largas, para no acumular fatiga a las piernas y, sólo corrí un día porque el test que hice con el grupo de Esteban me dió mucha confianza en esta disciplina.

    Natación: 12.000 metros de natación repartidos en 4 sesiones de piscina (como objetivo encontrar las mejores sensaciones de nado para el sábado).
    Bicicleta: 105 kilómetros en dos salidas (ahorrar piernas para la carrera).
    Carrera: 35 minutos en un único día (al haber terminado con tan buenas sensaciones y confianza el test con Esteban, decidí poner el modo ahorro) .

    Ya se habrán dado cuenta que esta semana de competición brilla por el descanso y sesiones no muy intensas. El objetivo no es otro que presentarme al triatlón lo más fresco, confiado y motivado para hacerlo lo mejor posible.

miércoles, 9 de julio de 2014

Allá vamos

    Con motivo de ir adquiriendo experiencia para el gran reto del 2014, éste fin de semana debutaré en la distancia de Half en Riaño (León). No soló será mi primer contacto en un Half (1,9 mtos natación - 90 kms bici y 21 carrera a pìe) sino que además me servirá, como un gran test, para ir conociendo los grandes esfuerzos que implica una competencia de unas 5 horas de duración.
  
   La preparación para septiembre pasa por ir quemando etapas y sumando pruebas a las piernas y, la del sábado es perfecta porque cumple los objetivos de una prueba dura por la hora que se celebra que es a mediodía, la localización de Riaño que está a más de mil metros del nivel de mar, el tramo de bicicleta que no está permitido el drafting "chupar rueda" y, para colmo, hay que correr una semi maratón para darlo por finalizado, casi nada.

    El objetivo no es otro que verme en escena en una distancia nueva y poder dominarla para llegar a ser Finisher. Las dudas de si podré bajar de 5 horas, luchar por un gran registro, batallar con los demás de cara a cara o, hacer una media maratón de menos de 1 hora 45 minutos queda al margen de todo, porque lo importante es ser, como dije antes, Finisher y, volver con una lección bien aprendida a la isla que me sirva para el gran día. Esto no implica que vaya a ser conformista en la competición, es todo lo contrario porque lucharé sin ningún prejuicio al ser mi estreno.

   

domingo, 6 de julio de 2014

El Semanal

    Otra semana que llega a su fin, pero con la novedad en la planning de añadir un buen test de carrera a pie en detrimento de un jornada de bicicleta. El test en cuestión ha sido esta mañana en Las Salinas con el grupo de Esteban para pillar confianza para el MedioIronman de la semana que viene en Riaño. Han sido casi 14 kilómetros de terreno muy variado por caminos, arena seca, pista, montaña arriba, montaña abajo y carretera. La finalidad de hoy no era otra que exprimirme con atletas más experimentados que yo y, sobre todo saber cuanto de fuerte tengo las piernas para aguantar la media maratón. Ya una vez terminada la carrera que era el objetivo, me he quitado un peso de encima al sentirme preparado para afrontar los 21 kms. 

    En el medio acuático ha habido sesiones muy dispares como la del martes que fue horrible, y otras mejores donde he podido disfrutar de la natación con series rápidas. Lo destacado, sin duda, esta semana ha sido sacar hacia adelante un día tan difícil como ése.

    Respecto a la bicicleta quité una jornada de pedales a lo que viene siendo la tónica general de cuatro por semana y, pienso que ha sido un acierto porque ya noté el martes calambres entrenando y ayer se me hizo muy dura las tres horas de sesión con una media de casi 32 km/h. Hay que intentar escuchar al cuerpo.

    Natación: 15.000 metros de natación repartidos en 4 sesiones de piscina (contento por saber sufrir y afrontar un día crítico).
    Bicicleta: 238 kilómetros en tres salidas (y doy gracias a que sólo han sido tres y no cuatro porque sino... necesitaba esa jornada de relax)
    Carrera: 150 minutos en tres días (ilusionado por aguantar y responder tan bien al test de hoy)

miércoles, 2 de julio de 2014

Vaya martes de locura

    El día de ayer no fue uno cualquiera en relación a los entrenamientos. Como casi todos los martes primero cae una sesión de natación a mediodía y, a eso de las 18:45 a la carretera con los compañeros a chuparnos dos horas y media de bicicleta.

     El entreno de piscina prometía bien porque el día anterior me encontraba muy fuerte y rápido, además de deslizar y flotar con mucha soltura, por lo que las series que tenía por delante, 2 x (5 x100), serían un buen trabajo que me iba exigir mucho esfuerzo si quería hacerlo como tenía en mente. Después de hacer un calentamiento de unos 2.200 metros, empiezo el turrón con unas sensaciones de nado horribles. No me parecía en nada al Furro que el día anterior nadaba con alegría, fuerza y flotabilidad. ¿Qué me estaba pasando? Lo único que me mantenía en tensión era que sólo iba un segundo más lento a lo marcado, pero no era positivo con mi forma de nadar y las sensaciones que tenía. Hago otra serie más, y mas de los mismo que la primera. Al finalizar la tercera me consigo animar un poco sabiendo que ya sólo me restan dos para terminar con esta agonía. Estaba nadando mal, muy mal, era consciente y no sabía como remediarlo. Como si de un tiempo muerto fuera, la quinta serie trajo 200 metros para suavizar que los aproveche para animarme pero a la vez a cuestionarme porque estaba hoy tan lejos de ayer.

    Termina mi tiempo de recuperación y otra vez al jaleo con las última cinco series de cien. La primera la consigo nadar bien de sensaciones y, además consigo, el mismo tiempo que las anteriores y sin desgastarme tanto por lo que me vengo arriba, pero al mirar el tiempo de la segunda serie me doy cuenta que todo fue un espejismo y que hoy la sensación de nadar torpe, tosco y pesado me va a seguir hasta el final. Es más, pienso en no exprimirme, y abandonar, porque no es mi día y hacerlas tranquilas, pero rápidamente desecho esa idea porque sé que después no me lo voy a perdonar y no estaré orgulloso de mí. Así que no toca otra que aguantar como sea la agonía de las últimas tres series que me dejan muy tocado física y mentalmente para el entreno de bicicleta que hay a las 18:30.

     Ya una vez en la ducha, pienso una y otra vez que mal lo he pasado y que mal iba nadando en comparación con ayer. Y, si tengo que ser sincero, no me apetecía para nadar salir más tarde a rodar con el cansancio mental y físico que llevaba dentro de mí, pero si algo quieres.... algo cuesta. Con todas estas malas sensaciones llega la hora de quedar y mi ánimo sigue un poco tocado pero no hundido. Seguro que la ingesta de carbohidratos en el almuerzo, la siestita de 25 minutos y la buena compañía de Los Fanegas consiguieron animarme y olvidarme del mal trago de la piscina.

     El entreno que tenemos, series de 6 minutos progresivas, no es el ideal, hoy, para mis flojitas piernas pero dicen que la sarna con gusto no pica y, sin darme cuenta y sin buscarlo me encontraba encabezando la grupeta en la primera serie al lado de Fran. Al termino de la misma me siento cansado pero con moral y ganas de afrontar las restantes. La siguiente fue una auténtica osadía porque no dejábamos de pasar relevos y el ritmo era altísimo, pero ahí estaba dando caña con los demas. Pero para caña la 3 serie que con viento a favor nos cruzamos las Salinas (5 kms) en apenas 6 minutos. Campillo empezó muy fuerte y me coloqué detrás de él para darle un relevo pero no tuve cojones suficientes para adelantarle, por lo que Fran saltó a relevarle y yo detrás suya como un piojo, y es que a 55, 57 ó 58 kms/h que íbamos pocos relevos podía dar pero en cambio si podía chupar rueda que ya es todo un logro a esas velocidades. Tras esta cabalgada de cruzarnos Las Salinas en tiempo exprés, toca 4 minutitos de relax que viene otras tres más y, cuesta arriba para Sant Antonio.

     En ese momento ya no me acuerdaba de la mala natación que hice a mediodía. Sólo pensaba en los 18 minutos de esfuerzo que me restaban para llegar a casa y, que iban a ser difíciles porque la compañía de Bernat y Campillo lo demandaban a gritos. Como si fuera un resurgimiento, en estas tres últimas me estrujo más y soy consciente de ello porque noto calambres en los cuadriceps llegando a Sant Josep. Ya ahí mis fuerzas están en el límite, que me descuelgo de mis amigos bajando hacía el pueblo. Una lástima quedarme bajando pero me siento infinitamente feliz conmigo mismo por haber guerreado tanto en un día donde lo fácil hubiera sido ver los toros desde la barrera.

domingo, 29 de junio de 2014

El Semanal

    Pedazo de entrenamientos que ha traído la semana. En natación sigo con el mismo agobio de meterme mucha intensidad, pero lo bueno es que estoy respondiendo bien con muy buenos tiempos y, además nadando con bastante flotabilidad y técnica. El pequeño miedo que tenía al correr, por problemas en la rodilla, se ha disipado y he vuelto a la rutina de correr 90 minutos. Como dice, Campillo, tendré que ir subiendo las tiradas y los días, pero mientras hay que fortalecer esas piernitas de jilguero. Y, de colofón las cuatro sesiones de bicicleta que han sido no sólo rápidas sino también duras por el terreno montañoso.

    Bufff, ahora pensando como han sido estos siete días me he dado cuenta que me he exprimido bastante, sobre todo, en el segmento de bicicleta llegando a los 350 kms con mucho terreno montañoso. Es la hora y momento de acumular horas que dentro de dos semanas afrontaré mi primer MedioIronman, y hay que llegar convencido de que puedo rodar 90 kilómetros de forma autónoma sin chupar rueda, ni depender de los esfuerzos de los demás.

    La cuenta atrás para el IM de Mallorca ya ha entrado en sus 90 días y, hay que ir probándome en carreras y conociendo a lo que me voy a enfrentar.

    Natación: 15.000 metros de natación repartidos en 4 sesiones de piscina (conseguiré la semana que viene bajar la intensidad?? me encantaría pero me pueden las series).
    Bicicleta: 350 kilómetros en cuatro salidas (llevaba más de dos semanas sin hacer cuatro entrenamientos y mi culo se resiente, jejejeje). Este kilometraje se debe al apoyo de Los Fanegas que hacen los entrenos más distendidos.
    Carrera: 90 minutos en dos días (fuera las molestias, he vuelto a subir a dos días).

    Haciendo el resumen me he percatado que esta semana no tiene ningún desperdicio de kilómetros e intensidad. Que siga todo igual.

lunes, 23 de junio de 2014

Mi peor pesadilla

    Hace 24 horas, exactamente, tuve un gran sueño despierto. Normalmente sueles soñar en la cama cuando duermes, pero éste era bien distinto porque estaba en un bar con mi pareja, su hermana  (vivió 15 años en Gran Canaria), su novio (también es canarión) y su nene. Allí nos encontrábamos todos viendo el fútbol desde la distancia con la única alegría de que el equipo conocido, como, PÍO PÍO volviera a la máxima categoría después de más de una década de agrios sabores.

    Mi afición al fútbol, y al gusto por los colores azul y amarillo de la U.D. Las Palmas, se extienden desde bien pequeñito. Es tan intenso este sentimiento que hasta un año fui vendedor de pipas, refrescos, chocolatinas, papas.... en nuestro feudo de 7 Palmas, el estadio de Gran Canaria, en donde ayer mi sueño se debía de realizar.

    El balón empezó a rodar a las 17:00 P.M. hora insular canaria y, atrás ya quedaba los más de 9 meses de liga regular donde la U.D. tuvo meses espectaculares consiguiendo grandes rachas de victorias seguidas y, otros no tan buenos con derrotas dolorosas en casa que llevó a la destitución de Sergio Lobera. En esos casi 10 meses de competición reglamentaria había contagiado a Catalina el fervor por el equipo amarillo, que hasta me preguntaba cuando jugábamos y como habíamos quedado. Después de terminar la primera parte del duelo contra el Córdoba, el resultado no se había movido desde que empezó el balón a rodar. Ya sólo restaban 45 minutos para alcanzar la gloria, y volver a ver a los cracks mundiales (en referencia a Messi, Cristiano, Iniesta, Diego Costa.. etc etc) por la isla otra vez.

     El inicio de la segunda parte no pudo ser mejor porque, en el minuto 50, tras un fallo defensivo de Raúl Bravo por la presión de Aranda, la Unión Deportiva se adelanta en el marcador y con ello trae el júbilo no sólo en el estadio Gran Canaria sino, además, a un bareto de Ibiza. El sueño parecía cada vez mas real porque ya solo restando diez minutos para la conclusión del partido, el Córdoba no asustaba lo suficiente como para pensar en una tragedia y, menos después de desaprovechar dos grandes ocasiones en las piernas de Vicente Gómez y, el goleador de la tarde, Apoño. Se dice, en el fútbol, que quien perdona lo acaba pagando.

      El destino de mi sueño empezó a nublarse cuando ya veía la meta. El reloj marcaba 85 minutos, 86 minutos, y así iba pasando hasta que en el minuto 91, el árbitro decidió detener el encuentro por invasión de aficionados amarillos al terreno de juego. Es aquí cuando despierto del sueño y me introduzco en una pesadilla llena de mataos descamisaos enseñando sus buenos tatuajes y cuerpos a base de anabolizantes. Pero como las noticias malas no vienen nunca solas, lo peor estaba por llegar cuando se reanuda el partido y a menos de sesenta segundos, para el final, el equipo andaluz consigue el empate a la heroíca, y con ello el gran premio de jugar la temporada 2014/15 en primera división. Lo que aconteció después del gol del Córdoba ya todos lo sabemos. Una representación circense de la mejor época del Circo Romano.

     Unos piensan que todo esto se podía haber ahorrado si Las Palmas hubiera marcado otro gol en esas ocasiones que se fueron al limbo, otros dicen que como un equipo profesional se pudo descentrar tanto en tan poco tiempo, otros achacan la derrota a la invasión de los energúmenos y, otros se refieren como responsable al Presidente, Ramírez, por no saber organizar mejor la seguridad del campo, siendo él mismo dueño, fundador y presidente de una empresa de seguridad, por lo que "en casa de herrero, cuchara de palo", parece.

    Después de 24 horas del partido, mi sueño se convirtió en una gran pesadilla que me tocó vivirla bien despierto y, por favor no busquen más culpables que el que se siente canarion de corazón ahora mismo está hundido y, no por el deporte, sino por el espectáculo horroroso y lamentable que dimos a toda ESPAÑA.

    SIEMPRE PIO PIO.
   

   

domingo, 22 de junio de 2014

El Semanal

    Otra semana que ha pasado volando y otro domingo que no he salido en bici. Es el segundo domingo seguido que no aprovecho para acumular kilómetros, encima de la bicicleta, pero no todo es entrenar en la planning, hay que saber dar tiempo al descanso mental y físico.

    Para darle descanso físico al cuerpo, esta semana acudí al osteópata por las molestías que tenía en la rodilla. La intensidad del dolor en estos días había disminuido y me dejaba entrenar sin complicaciones, pero no me la quería jugar y preferí pasar por el taller de chapa y pintura, para controlarme y no excederme en esfuerzos innecesarios que traen lesiones.

    Ha sido unos siete días con muy buenas sensaciones dentro de la piscina. Con muy buenos entrenos de calidad donde me he exprimido mucho con series cronometradas. En la bici, cada semana, siento que la acumulación de horas está haciendo su función porque cada vez voy mas constante de ritmos. Y, en la carrera a pie, mi gran talón de Aquiles, mientras no me rompa la cosa va viento en popa.

    Natación: 14.500 metros de natación repartidos en 4 sesiones de piscina (semanita muy buena de series).
    Bicicleta:  240 kilómetros en tres salidas (otro domingo de columpiada sin salir a la carretera , jejeje).
    Carrera: 50 minutos en un solo día (me hubiera gustado hacer más minutos pero con la rodilla así es tontería forzar).

   

   

martes, 17 de junio de 2014

Las Promesas

    Si equipos tan poderosos como el Real Madrid, F.C. Barcelona o Atlethic de Bilbao gozan de una gran cantera de futbolistas, nosotros el Club Triatlón Ibiza Fanegas tenemos en nuestras filas a la flor y nata del triatlón pitiuso, balear e incluso nacional. Igual, piensan que me estoy llevando por mis sentimientos y que no soy muy arbitrario pero después de que sepan quienes son, estos cremas, pensarán que el relevo generacional está más que asegurado gracias a estos Faneguillas. Son pocos pero muy osados y con ganas de hacer cosas grandes.
    Josep (Moha): Sin duda alguna es la joya de la corona no sólo de los Fanegas sino del triatlón nacional. El pasado fin de semana se coronó Campeón de España Sub 23 en la distancia medio ironman (half). A pesar de su corta edad ya se ha batido con ilustres triatletas españoles como por ejemplo, el olímpico, Xavi Llobet en Menorca, el cual ya sabe como se las gasta Josep corriendo. El faneguilla domina a la perfección la bicicleta y no hablamos, ya, de la carrera a pie. En la natación este año ha dado un paso de calidad. Torres, por favor, no te pongas límites porque estas llamado a escribir muchas crónicas de éxitos.

    Isma (Ismatron): Ya sólo su pseudónimo asusta, pues si lo vieras en persona pensarías lo mismo. Isma, ahora está en un momento indeciso porque no sabe si tirar para el Tri o meter la cabeza en el ciclismo. Debido a una lesión que se produjo en el Diciembre pasado, este año se ha centrado en dar pedales y ya ha recogido la recompensa en dos pruebas ciclistas disputadas en Palma con presencia de deportistas amateur. En ambas se subió al cajón como tercero. Si además sumamos a la bicicleta que es un experimentado nadador porque lo practicó de pequeño, pues tenemos otra promesa como Josep. Ismatrón ya ha sido finisher de un Ironman, y hasta el kilómetro 18 de la carrera a pie, el amigo, encabezaba la prueba, casi naaa.

    Pedro (Valenciano): La cabra tira al monte y por tanto, nuestro, Pedrito no tiene rival ahí. Hablando esta mañana con él me he dado cuenta que es un killer de las competiciones de montaña, ya sea un duatlón de montaña, un triatlón de montaña, un trail de montaña o competiciones btt. Sus campeonatos pitiusos, baleares y alguno nacional lo corroboran. Además puede decir con la boca bien grande que ha sido finisher del Ironman de Lanzarote y, también, de Enbrunman. En la actualidad, el trabajo lo tiene muy consumido y no entrana mucho pero tampoco lo necesita porque este chico se cayó, de pequeño, en la marmita del druida.

    Mateo (El Niño Melón): Mateo sufre el síndrome de Temporada Ibicenca, por lo que en esta estación desaparece y se pone a currar como cualquier otro hijo de vecino. Aún así cuando compite da todo lo que tiene, que no es poco, y puede llegar a hacer podiums como el que hizo en el duatlón de Santa Eulalia detrás de Josep y Campillo. Hoy mismo me dijo que quiere hacer el half Ibiza, así que tendremos noticias de Mateo porque es otro valor que tiene que explotar todavía.

    Alexis (Alerxis): Lo primero es mandarle muuuuuchos ánimos para que se recupere del accidente de la semana pasada que tuvo entrenando en bici. Alexis en su primer año de triatlón, el año pasado, ya dió muestras de como se las gasta ganando el Triatlón Olímpico de Valencia en la categoría Sub 23. No quiero hablar mal de nadie porque todos tenemos nuestros defectos, y menos de alexis que es un cacho de pan, pero cuando sepa dominar sus nervios y dudas tendremos a un triatleta top. Recuérdate que sólo llevas un año y ya has hecho mucho. Valóralo, por favor, porque tienes dinamita para rato.

    Adrian (Alf): A nuestro amigo le pasa el mismo factor que a Mateo en verano, por lo que no tiene tiempo para entrenar. A Adri, desde mi punto de vista, la distancia olímpica le va perfecta porque no cojea de ninguna disciplina y, ya el año pasado lo demostró en Formentera logrando un meritorio 3 puesto en la clasificación absoluta.  Por Adri siento una especial empatía y no se porqué, por que tampoco nos conocemos desde hace tiempo, pero son de esas personas que te alegran el día con su presencia y cachondeo. Si el trabajo le concediera una tregua es un 1 en la quiniela para hacer cosas muy buenas. Confío ciegamente en él


    A que no me equivocaba al referirme que la cantera Fanegas es la flor y nata de este deporte?? Lo que no puedo explicar y ustedes menos entender, es la gran armonía que hay en el grupo.




domingo, 15 de junio de 2014

El Semanal

    Semana muy movida de acontecimientos realizados por ibicencos. El lunes a las 2 de la madrugada llegaba Juanjo Serra, a Cala d¨hort, después de nadar más de 37 horas desde la península. Gran gran proeza la llevada a cabo por el nadador de Santa Gertrudis. Enhorabuena Tritón.


    Ayer, en la localidad madrileña de Buitrago, se celebró el Campeonato de España de triatlón de media distancia (1,9 - 75 - 21) con la participación de mis compañeros Fanegas: Josep, Campillo y Lucas. El más joven de los tres, Josep, se trajo el título nacional Sub 23 a las pitiusas y, además en la categoría élite consiguió entrar en la posición decimotercera. Este chico no tiene límite y, si lo tiene es porque él se lo quiere poner. Felicidades Josep. Te lo mereces. Mi amigo Capitán,terminó el trigésimo después de una odisea de triatlón con múltiples calambres debido a la poca hidratación. Hablando ayer con el me dijo que sufrió muchísimo y, que se siente muy orgulloso por haberlo terminado porque al final le díó la vuelta a la situación y no se rindió. Campillo, eres todo un ejemplo de superación. Por último, Lucas, no pudo terminar la prueba por sus problemas que le ha tenido toda esta temporada renqueante, y no le ha dejado entrenar como el quisiera. Bro, eres un espejo donde nos deberíamos de mirar porque tienes huevos suficientes para hacer una tortilla. No me olvido de la gran actuación de David Sandocan en Zarautz. Eres el jodido Superman de la Calle y, lo sabes.

    La noticia mala de la semana se la ha llevado Alexis y Buitre en forma de colisión con un coche en un entrenamiento de ciclismo. No hay que lastimar ninguna rotura pero el pobrecito Alexis tiene más de 25 grapas en el hombro y, unos dolores anormales. Desde aquí te mando un fuerte abrazo y una mayor recuperación que sé que te gusta mucho este deporte. Ánimos chicos.

    Referente a mi semana pues debo de decir que en el agua me he encontrado muy bien. Incluso debería de bajar la intesidad porque me castigo mucho en la piscina y, cada vez me cuesta más ir a nadar solo. En la carrera a pie, mi talón de Aquiles, me ha dado un sustito con un dolor agudo en la rodilla que ha hecho que salte las alarmas rapidamente, por lo que he decidido solo hacer una sesión y no forzar la máquina que la temporada es molto longa. La molestía me ha asustado que el día de hoy, domingo, me lo he tomado de descanso total por lo que no he salido en bici. Hay que escuchar, de vez en cuando, al cuerpo.

    Natación: 15.500 metros de natación repartidos en 4 sesiones de piscina (semanaca natatoria)
    Bicicleta: 208 kilómetros en tres salidas (faltaría la salida de hoy pero he decidido...descansar)
    Carrera: 50 minutos en un sólo día (la historia era hacer otro rodaje igual para ir subiendo progresivamente pero las molestias en la rodilla me han frenado y, he decidido parar por esta semana).

jueves, 12 de junio de 2014

Los Fanegas

    Todos, o casi todos, estamos orgullosos de pertenecer a una agrupación, coorporación, club o sociedad de amigos que comparten caminos, ideas, objetivos o ilusiones igual que el tuyo. Yo no voy a ser distinto a los demás en este aspecto y, puedo decir y afirmar con la boca bien grande que en Ibiza he encontrado ese grupo de colegas, que considero mi segunda familia, con los que me une el gusto a superarnos día tras día en un deporte tan sacrificado como es el: TRIATLÓN.

    Este grupeto de amigos no es otro que los refutados FANEGAS, amigos es lo que somos ante todo, que está formado por un elenco de catorce ó quince integrantes de edades tan diferentes que el más grande podría ser el padre del más viril. Igual este detalle parece muy insignificante pero en el respeto de los más jóvenes, la experiencia de los mayores y motivación e ilusión de todos por mejorar, ha logrado formar un bloque tan sólido que este año hemos creado: EL CLUB TRIATLÓN IBIZA FANEGAS.

    El club está formado por personas lógicamente pero el  motor que lo mueve todo son las ganas de compartir con los tuyos entrenamientos, viajes que nos quedan por hacer, ascensiones a la Cala San Vicente y alegrías que te dan tus amigos por sus éxitos... etc etc.

    Se estarán preguntando quienes son estos pedazos de Fanegas que tienen loco a Furro, creo que es al revés, más bien yo les tengo loco y les debería de pagar un psicólogo. En esta publicación voy a presentar a la mitad, al grupeto de treinti o cuarenti, jejejeje, para dejar en la siguiente a los famosos tuenti, jejejeje.

    Lucas (la locomotora de ses paises): Quiero presentarlo en primer lugar porque el fue quien me animó a practicar triatlón y, además fue el que me abrió las puertas a formar parte de la familia. Sin duda es alguien especial para mí y por eso entre nosotros nos hacemos llamar BRO. Entre sus palmarés puedes encontrar 4 participaciones al IM Lanzarote, otras tantas al Home de Ferro, más de una veintena de Medios Ironman y, competiciones en bici de montaña como la ruta de los conquistadores en Costa Rica, Pedal de foc o TransCataluña, por ejemplo.

    Campillo (Capitán): En todo grupo siempre hay alguien que es la cabeza o insignia de la formación. En nuestro caso la figura recae en Campillo con sus más de 10 Ironman, de los cuales 3 han sido en el campeonato mundial de Hawaii. Yo no voy a descubrir, ahora, al Campillo deportista pero si he tenido la suerte de saber como es como amigo, y sin duda es mucho mejor todavía al triatleta si es que se puede.

    Bernat (Buff): Que no te engañe cuando salgas en bici porque lo vas a pasar muy mal si sales con el sólo. Yo con Bernat no he tenido mucha relación porque ha dejado el triatlón de lado y se ha centrado en carreras de bicicleta. A sus espalda carga con un Ironman de Lanzarote en donde pudo adelantar a mas de 300 personas, solo en el sector de bicicleta. Yo sufro cuando salgo con el porque sé que la vuelta al pueblo será en fila india comandada por él.

    Diego Marín (Machi): En la actualidad está en un bache transitorio que no sabe si entrenar para triatlones o trail de montañas. Machi, que es como le llamamos puede presumir de haberse enfretado al ironman de Lanzarote y haberlo terminado. Como también ha terminado triatlones en distancia olímpica o doble  olímpico. Su afición por correr le ha llevado a participar en Cavalls de Vent. Todavía te quedan muchas cosas por hacer y los sabes.

    Diego Pérez (Heman): Desde el momento que conocí a Diego me quedé to loco y por eso le llamé Heman. Dieote sufre las molestosas incomodidades de los gemelos pero como buen guerrero gaucho ya se ha comido 1 ironman y 2 medio ironman. El dice que no tiene grandes participaciones o logros como podría ser...... pero yo quiero a unos cuantos Heman a mi lado. Me encantaría verte en Palma.

    David Pérez (Sandocan): David no presume de un talento innato o un cuerpo ideal para el deporte, pero si puedo ir con la cabeza bien alta porque tiene valentía, coraje y sufrimiento para regalar a un equipo de rugby. Su constancia le ha regalado 6 Ironman y tantos Homes de Ferro. Un muy buen ejemplo de superación y, también de impuntualidad. Nunca se jueguen un viaje a David que pueden llegar tarde.

    Fran Pérez (Paquito): Posiblemente es con quien me ría más y no es porque seamos superamigos, sino porque hay algo que sale solo. No quería hablar mal de nadie pero con Paquito haré una excepción porque, el colega, tiene una calidad para este deporte que no la usa. Sin duda es como el alumno que se conforma con aprobar con un suficiente, pero Paquito tiene una muy buena natación, un excelente sector en bici y una carrera a pie como todos. Por favor, anímate a Palma que la unión hace la fuerza. El amigo ya se ha cascado 8 medio ironman y 4 olímpicos.

    Jose Luis Gambacorta (Gamba): Sus mejores años, según el, fueron en el 2011 donde tenía tiempo para poder entrenar. Gamba poseé una terrorífica carrera a pie donde va a dar el resto, así que no te la jueges al sprint. Sus participaciones se cuentan en distancias más cortas, sprint y olímpicos, donde su explosividad es determinante, aun así tiene un medio ironman donde quedó en el top 20. Nada fácil.

    Diego Ojeda (Mafioso): Ojeda viene del mundo de la bicicleta con lo que puedes aprender un montón y además lo hace encantado. A día de hoy, al mafioso, le falta tiempo para poder entrenar , además de la mala suerte que ha tenido con esa lesión que le paralizaba el cuerpo. Ojeda, no cambies por favor porque tiene que haber alguien cuerdo en el grupo que se responsabilice por los demás, jejejeje. En su historial tiene 2 Ironman, 7 half, 4 olímpicos y una carrera de bicicleta de 312 kilómetros, por ejemplo. Te escribo en último lugar porque no tienes ficha con nosotros y eres mallorquín, jejeje.

   

domingo, 8 de junio de 2014

El Semanal

    Semanita parecida a la anterior, pero al revés, porque se puede dividir en dos partes: de lunes a miércoles ha sido light por la resaca del irontri, y de jueves a domingo a meter caña en agua y carretera haciendo kilómetros como un loco.

    Los tres primeros días han sido de recuperación total donde se ha buscado oxigenar el cuerpo que venía forzado de Palma, así que aproveché para ir al osteópata y visitar a Adri a Las Salinas que no todo es hacer deporte y sacrificios, también hay que darse caramelitos y caprichos. Ya, el jueves la cosa cambió y se ha sufrido mucho encima de la bici con entrenamientos montañosos que han venido acompañados de días calurosos.

    Este finde lo recordaré bien porque nos hemos comido más de 200 kilómetros de terreno rompepiernas con un solano cercano a los 30 grados. Han sido dos sesiones intensas y asfixiantes pero igual de gratificantes por haberlas terminado.

    Natación: 13.200 metros repartidos en 4 sesiones de piscina.
    Ciclismo: 336 kilómetros en 4 días (vaya fin de semana de dolor de almorrana, jeje)
    Carrera: 90 minutos de carrera continua en dos días. (vamos sumando poco a poco)

martes, 3 de junio de 2014

Subidón de Triatlón

    Ya puedo decir, por fin, que he hecho un triatlón en la modalidad de distancia olímpica (1,5 kms de natación - 40 kms de bici y 10 kms de carrera a pie) y que ha sido un auténtico subidón de adrenalina desde el día anterior, por la convivencia de mis amigos que son a la vez mis compañeros de club, hasta el momento de cruzar la meta.


    El triatlón era el domingo en Cala Millor (Palma de Mallorca) así que hubo que pillar avión para llegar a la isla más grande de Baleares donde me estaba esperando Ojeda, pedazo de anfitrión que es porque no sólo me fue a buscar al aeropuerto sino que además fuimos a nadar a la piscina y a comer a su casa. Ya una vez comido, partimos (Ojeda, paquito y yo)  hacia el Este de Mallorca (Cala Millor) para llegar antes de las 19 horas que hay que pillar dorsales, dejar bici en boxes y preparar bolsas de carrera para las transiciones. Todavía quedaban más de 15 horas para darse el pistoletazo de salida, pero mi inexperiencia en este deporte se notaba porque me sentía totalmente nervioso e inseguro en hacer o tomar alguna decisión por mí mismo. Le agradezco a Ojeda, Paquito, Josep y Campillo los consejos de organizarme las bolsas, preparar la estrategia o escuchar palabras de ánimos que fueron muy bien recibidas. Gracias, amigos!!!!!

    Sin ninguna duda el día anterior, a la prueba, siempre florecen un poco los nervios por esa inseguridad creada por uno mismo o esa tensión autoimpuesta, pero como reseñe antes las palabras de mis compañeros, en la cena, y la forma de como me lo transmitieron me calmaron bastante. Ya sólo quedaba dormir para llegar lo más descansado y fresco a la cita.

    Con este panorama se hace las 07.00 A.M. hora señalada para despertarnos, pero Paquito decide dar 10 minutos de cortesía para así añarar un tiempo extra de relax (jejeje), desayunar, terminar las jo... bolsas de transiciones y partir a los boxes para encontrarnos con los demás. El tema de conversación al juntarnos fue unánime, "has visto que olas" y "que viento hace para la bici". La verdad que para ser mi primer triatlón no eran las mejores condiciones por el molestoso invitado de última hora (el viento), pero es igual de fastidio para todos por lo que no queda otra que ponerse el neopreno que esto ya comienza.

    Con tan sólo diez minutillos de calentamiento de natación y unas últimas palabras de ánimos entre nosotros, la hora de empezar se nos echó encima con la voz de YA!!! por parte del juez árbitro. La entrada a la playa no fue fácil porque tenía que saltar olas, correr sin caerme para que no me pisaran y evitar los empujones de los demás, pero ya una vez nadando me coloco en la cabeza del grupo y sigo a la moto de agua que me hacía de guía. Las dos primeras boyas me cuestan de rebasar porque se nada en contra de marea y es muy difícil avanzar con tanto vaivén, pero ya una vez enfilada la tercera todo cambia porque ya nado hacía la orilla con la ventaja del viento y, decido de cambiar mi forma de nado por uno más cómodo y largo para no fatigarme tanto que el tramo de bicicleta va a ser duro, pero antes tengo que salir de la playa y recorrer el paseo donde recibo un multitudinario recibimiento por parte del público, este recuerdo es imborrable e inexplicable. Buffff. Que subidón!!!!!!!

    La natación salió bien, pero ahora toca subirse a la bici y defenderme como un gato panza arriba y arañar kilómetros y más kilómetros. La transición no es nada buena porque duro bastante en ponerme las calas, pero eso era algo con lo que contaba porque nunca lo he practicado. El recorrido no lo conocía pero mis amigos me dijeron que no tuviera miedo que era con bastantes toboganes y subiditas que me iban perfecto. Era verdad, nada más empezar un repechito duro para calentar los cuadriceps y,  es en donde me adelanta un alemán. Yo sé que esa no es mi carrera y, que tengo que fijarme en la mía y sólo centrarme en mis pedales y cuentakilómetros. Así va pasando kilómetros y, a tan sólo mil metros de finalizar el tramo de bicicleta, mi gran amigo, Campillo me adelanta, y por tanto compartimos zona de transición.

    Última transición que hago rápidísima y, en donde, vuelvo a sentir el latido y aplausos del público. Los primeros metros dela  carrera fueron duros porque sentía las rodillas entumecidas y los isquiotibiales como dos puñales, pero el adelantamiento, de nuevo, de Campillo me animó a confiar en mí y ser valiente en seguirle. Ahora es muy fácil decir que me equivoqué persiguiéndolo como un loco a 3,30 el kilómetro pero mi cuerpo me pedía ese subidón. Recuerdo que fueron unos 4 ó 5 mil metros corriendo con un gran amigo en una bonita carrera. Esta vivencia ya nadie me lo podra quitar. Pasado el efecto subidón y mermadas mis fuerzas por falta de entrenamientos de carrera, me hundo y me descuelgo de Campillo pero decido disfrutar con la cabeza bien alta y llegar a la meta con todo lo que me queda dentro. Me restan mas de veinte minutos de esfuerzo para llegar a la meta pero los guiris y los demás compañeros que corrían me alentaban a seguir.

    Trás mas de 2 horas y 22 minutos, o algo así, cruzo la línea de meta y, también cruzo una de mis metas que me había marcado hace tiempo, terminar un triatlón. Mi alegría es infnita porque es compartida con Josep, ganador del triatlón, Campillo, tercero en la clasificación, Alexis (14) , Sergio Torres y, de mi Paquito que esta vez no le salió como esperaba. Mención a aparte tiene Ojeda que tuvo que abandonar por problemas de salud, pero el tipo es un grande porque aún así tomó la salida. Mi posición final fue quinto pero me quedo con todas las emociones y sensaciones vividas en esas más de dos horas.

 

lunes, 2 de junio de 2014

El Semanal

    Semana atípica, la que dejamos ayer, porque todo giraba alrededor del triatlón olímpico de Cala Millor (Palma Mallorca). Con esta competición, que fue ayer, la planning sólo se vió modificada en el sábado porque no me dió tiempo a rodar, pero por lo demás ha sido la misma rutina pero con menos intesidad para así llegar con ánimos y fuerzas a la competición.

    Lo de atípico también se debe a la aparición de los nervios por afrontar mi primer triatlón en distancia olímpica (1,5-40-10). No voy a negar que no estuviera como un flan porque sería engañarme a mí mismo el primero, y aunque esta sensación ya la conozco de hace bastantes años cuando nadaba, ahora con el triatlón es igual o peor porque tienes que pensar en tres deportes en vez de en uno.

    La semana se partió en dos bloques : A) de lunes a miércoles con entrenamientos intensos y, B) de jueves a sábado con sesiones moderadas donde se buscaba la velocidad y esa chispa necesaria para ir más suelto.

    Natación: 15.100 metros repartidos en 4 sesiones de pìscina, y sin contar los 1.500 metros del triatlón.
    Bicicleta: 132 kilómetros sólo en dos salidas, mención a parte los 40 kms de ayer.
    Carrera: 90 minutos en dos días, además de los 42 minutacos del sector de a pie de la competición.