Entreno día 06/11

     90 minutos de bicicleta de carretera.

     Después de tres días sin hacer el huevo (jueves, viernes y sábado), por los problemas de la sobrecarga en el cuello, trapecio y triceps, hoy a eso de las 15:30 decidí salir a rodar un poco para despejarme, y expulsar toda esa desidia que me estaba atrapando.  La incertidumbre de saber como iba a estar de cómodo encima de la bici y/o, de como me iba a sentar la salida me preocupaba porque no sabía si me estaba anticipando a la vuelta a los entrenos.

       Ya dije en post anteriores que el deporte no es lógico, y la sombra de las lesiones es grande y oscura. Así que para la salida de hoy me amparé en las palabras de Raúl, el fisio, que me dijo: "haz el deporte que no te moleste". Por lo que me marqué a fuego, en la cabeza, que si me sentía con dolores más allá de los que tengo en casa sin hacer nada, me daba media vuelta a casa con el rabo metido entre las ruedas, jejeje.

         La salida a posteriori, no sé todavía como me levantaré mañana, ha sido positiva porque me ha servido para pillar ese balón de oxígeno que te hace sentir bien contigo mismo, y querer seguir entrenando con la misma decisión que antes, pero con tranquilidad que todavía estoy en proceso de recuperación.